Activando contablemente los gastos I+D+i aumentas el Beneficio Neto
Cada vez más las empresas se plantean la realización de proyectos I+D como mejora de competitividad y posición en mercado. En este entorno hemos de contabilizar adecuadamente los gastos I+D+i. Su realización no sólo no constituye un gasto, sino que el importe de los capitales invertidos, pueden ser transformados en un activo integrado. Este se integrará en el balance de la empresa, como si de un inmovilizado más se tratara.La imputación contable de estos gastos I+D+i, en principio, son gastos del ejercicio. Tanto si se realizan por parte de la empresa como por encargo a terceros, dando lugar a los siguientes asientos: 
No obstante, los gastos i+d+i podrán activarse como inmovilizado intangible, desde el momento en que cumplan las siguientes condiciones:
- Estar específicamente individualizados por proyectos y su coste establecido para que pueda ser distribuido en el tiempo.
- Tener motivos fundados del éxito técnico y de la rentabilidad económico-comercial del proyecto de que se trate.
En cualquier caso, el registro contable para realizar la activación es el siguiente:
Una vez activados los gastos I+D se amortizarán atendiendo a los siguientes criterios:
- Los gastos de investigación que figuren en el activo deberán amortizarse durante su vida útil. Siempre dentro del plazo de 5 años. En el caso de que existan dudas razonables sobre el éxito técnico, o la rentabilidad económico-comercial del proyecto, los importes registrados en el activo deberán imputarse directamente a pérdidas del ejercicio.
- Los gastos de desarrollo, cuando se cumplan las condiciones indicadas para la activación de los gastos de investigación, se reconocerán en el activo. Y deberán amortizarse durante su vida útil, que, en principio, se presume, que no es superior a 5 años.
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